El
sacerdote gallego Luís Rodríguez Patiño, responsable de varias parroquias entre
la Coruña y
Lugo, ha pedido la excomunión para los políticos y banqueros. Mientras todo el
mundo discute la sandez del buey y la mula en el portal de Belén, este cura ha
decidido precintar uno de los belenes de la iglesia de Cambás, localidad
coruñesa de Aranga, porque según se
explica, el niño Jesús encarna los problemas de los seres humanos, está con los
pobres y en estos nefastos tiempos sería un desahuciado más. Aboga este
valiente sacerdote por un Iglesia humana e irónicamente agradece al vaticano
que haya sacado al buey y la mula del portal, ya que estos animales encarnan a
banqueros y políticos disfrazados.
Lo
curioso de todo esto es que la jerarquía de la Iglesia , lo que un
servidor llama desde hace muchos años la Iglesia Oficial , apenas se
pronuncia sobre los injustos desahucios provocados por la usura de los bancos y
la connivencia de los políticos, subyugados a esos caprichosos vaivenes de los
‘mercados’. Como los monseñores viven, y
muy bien, en su estatus privilegiado, solo piden a los políticos que protejan a
la familia, a la tradicional, claro. O poniéndose
rotundamente a los matrimonios homosexuales, o dicho más finamente, están en
contra de la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 6 de noviembre
que reconocía estos matrimonios legales. Y para esto titulan su nota con un
titular sugerente: ‘Nota sobre la legislación familiar y la crisis económica’,
ingenuo de mí que al leer esta nota pensé que iban a denunciar las injusticias
y brutales recortes que estamos sufriendo la gran mayoría de ciudadanos, pero
no, les preocupa esas cuestiones morales, ellos lo tienen todo asegurado, que al resto de españolitos nos traen al
pairo. Porque hay cosas más importantes como el robo de derechos, de
dignidad y el empobrecimiento de todos
nosotros.
En
la nota de prensa final de la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal
española, sí nos encontramos con una alusión de dos líneas de su presidente el
cardenal Rouco Varela sobre los
desahucios, y dice así: “ Que se busquen con urgencia soluciones que permitan a
esas familias desahuciadas, igual que se ha hecho con otras instituciones sociales,
hacer frente a sus deudas sin tener que verse en la calle”. Imagino que esas
instituciones sociales son los bancos y cajas de ahorro, pero no se atreven a
nombrarlos, y menos a echarles la culpa, que la tienen, sin duda. Algo es algo,
hemos pasado de echarles a la fuerza y con antidisturbios de la Almudena , a pedir por
ellos.
No
son tan atípicos estos personajes, son valientes, sinceros y mediáticos sin querer, y tienen en común la
persona de Jesús del Evangelio.
Para
los católicos estamos en Adviento que es esperar contra toda esperanza. Que no
nos amarguen la cercana Navidad.